Verano, vacaciones y consejos de cuidado bucal

El verano es el momento del año en el que la mayoría toma vacaciones. Es el momento de relajarnos del trabajo y romper con la rutina. Son frecuentes las salidas a la playa, las visitas turísticas o los desplazamientos largos. Pero esos cambios en nuestro día a día también pueden dificultar el mantenimiento del cuidado habitual de nuestra boca. Algunas sencillas recomendaciones nos pueden ayudar durante estos días.

Playa en Bali
Playa en Bali

Un consejo para los viajes es utilizar cepillos plegables. Al ocupar menos espacio que uno normal son más fáciles de transportar: se pueden guardar fácilmente en la mochila, el bolso o incluso en un bolsillo. Junto al cepillo podemos guardar un tubo de pasta de dientes de tamaño mini. Además, en caso de volar lo podemos llevar en el equipaje de mano, a diferencia de los envases superiores a 100ml que no están permitidos.

Comer fuera de casa o de picoteo es también más usual en estas fechas. La recomendación principal es la misma que en cualquier momento del año: un cepillado después de cada comida. Pero como sabemos que durante las vacaciones es más difícil, insistimos en al menos dos veces, después del desayuno y sobre todo tras la cena, el cepillado más exhaustivo del día.

Para ocasiones puntuales en las que no podamos cepillarnos tras comer, un recurso fácil son los chicles sin azúcar con xilitol, ya que aumentan el PH de la boca y dificultan la acción de las bacterias. Esto en ningún caso sustituye a un buen cepillado con pasta de dientes.

Azúcar y bebidas frías

En estas fechas no sólo cambia la rutina, también lo hace el tipo de alimentos y la dieta. Con el aumento del tiempo libre y del calor aumenta el consumo de helados, zumos, refrescos y bebidas en general. Por ejemplo en el caso concreto de la cerveza en los meses calurosos se incrementa la demanda en un 25%.

Muchos de estos alimentos y bebidas destacan por su alta concentración en azucares. Un consumo superior al recomendado tiene efectos negativos en la salud bucodental, entre ellos favorece la aparición de las conocidas caries. Además, el abuso del azúcar también perjudica a la salud general y es un factor de riesgo en enfermedades como la diabetes.

Por todo se recomienda un consumo moderado de estos alimentos. Para las bebidas la mejor alternativa es sustituirlas por agua, la mejor forma de mantenernos hidratados. Una buena hidratación contribuye a que se genere más saliva, y ayuda a remineralizar y proteger el esmalte.

Por el contrario, los alimentos ácidos rebajan el PH de nuestra boca y favorecen la aparición de placa bacteriana, que a su vez produce una perdida de minerales. Esto se conoce como desmineralización.

Por eso, si tenemos una gran pérdida en el esmalte, es normal que al consumir alimentos y bebidas, en especial las frías, que suelen ser más consumidas en verano, se produzca hipersensibilidad dental, que causa dolor o molestia al contacto con los dientes.

Además de intentar evitar las bebidas muy frías, se aconseja moderar, pero no evitarlos por completo, los alimentos que son ácidos y que causan un gran desgaste en los dientes. Algunos de los más conocidos son la lima, el limón, la naranja, el vino o el vinagre. De esta manera ayudaremos a evitar la hipersensibilidad dental.

Accidentes deportivos

Con más tiempo libre muchas personas aprovechan para hacer más actividades deportiva. En el caso del surf, ciclismo o los llamados deportes extremos, con un poco de mala suerte se puede producir algún golpe o caída que cause algún tipo de fractura en los dientes. En estos casos, una vez producido el accidente, debemos acudir cuanto antes a un odontólogo.

El verano pasado tuvimos el caso de un paciente deportista que sufrió un accidente en el mar y se fracturó una de las paletas. En la clínica retiramos el trozo de diente fracturado en el accidente y al momento se le colocó un diente nuevo sobre el implante.

Para concluir recordamos que junto con una correcta higiene bucal, para mantener una correcta salud en nuestra boca es aconsejable acudir al menos a una revisión anual con nuestro dentista. En esta época estival con más tranquilidad puede ser un buen momento para una revisión periódica, sobre todo si tenemos previsto realizar algún viaje largo en breve, y así poder partir sin problemas en la boca que nos puedan estropear el viaje.

Recordamos que en agosto la Clínica Ortiz-Vigón no cierra y durante todo el mes estamos atendiendo pacientes en un horario especial de 8:00 a 16:00 horas.

¡Buenas vacaciones!