Te explicamos todos los detalles sobre la regeneración ósea, un tratamiento clave para el éxito en la colocación de implantes dentales. A la hora de realizar un plan de tratamiento de implantología y periodoncia, es vital que la cantidad y calidad de hueso disponible en nuestro maxilar sea suficiente.
¿Qué es la regeneración ósea dental?
Cuando hablamos de regeneración ósea guiada nos referimos a un conjunto de técnicas que tienen como objetivo darle el volumen adecuado a nuestro hueso maxilar para sustentar nuestros implantes dentales y que queden 360º rodeados de hueso y protegidos por el mismo.
En definitiva, realizarse un tratamiento de regeneración ósea guiada nos permite recuperar la calidad de la masa ósea en nuestro maxilar, tanto en anchura como en altura, y nos garantiza una mejor funcionalidad maxilar.
¿Por qué perdemos hueso maxilar?
La pérdida de hueso en nuestro maxilar puede estar causada por diferentes motivos. La enfermedad periodontal, la inflamación de nuestras encías, es una de causas principales de esta merma del hueso maxilar.
Además, la ausencia de piezas dentales, especialmente de manera prolongada en el tiempo, así como extracciones agresivas provocan un descenso del nivel de hueso maxilar que requerirá de regeneración antes de realizar cualquier colocación de implantes. La pérdida de uno o más dientes lleva de la mano una pérdida de hueso que puede acabar comprometiendo la colocación de los implantes y futuro de los mismos.
¿En qué casos es necesaria la regeneración ósea?
La regeneración ósea guiada es un tratamiento común en aquellos casos de pacientes que requieran de colocación de implantes dentales pero que presenten una pérdida de hueso maxilar que pongan en peligro el éxito de la colocación de dichos implantes.
Por tanto, para prevenir el fracaso en la intervención requiere de una planificación previa para decidir entre: realizar una primera fase quirúrgica de regeneración ósea guiada o preservación alveolar y colocar el implante en una segunda fase quirúrgica o realizar la regeneración a la vez que la colocación del implante si es posible con el fin de reducir los tiempos de tratamiento.
Importancia del diagnóstico y plan de tratamiento
Serán los especialistas en periodoncia e implantología quienes, tras un análisis exhaustivo de tu caso particular, y habiendo tomado todas las pruebas diagnósticas, determinen cual es el tratamiento más adecuado para ti.
Para determinar un déficit óseo son necesarias diferentes pruebas diagnósticas. Además de una exhaustiva exploración clínica por parte de un especialista en periodoncia e implantes, debemos realizar un estudio diagnóstico mediante radiografía en 3D, con nuestro equipo CBCT, que nos muestra con claridad la cantidad y calidad de hueso existente.
Una vez determinada la falta de hueso, se planifica el procedimiento necesario para la regeneración ósea guiada, así como la colocación de los implantes. Además, en función de la situación individual se escogen los abordajes quirúrgicos y biomateriales más adecuados para cada situación tras la realización del estudio diagnóstico implantológico.
La duración de una cirugía de regeneración ósea varía según cada caso particular, si bien es cierto que es raro que cualquier procedimiento exceda las 2 horas.
El injerto óseo debe realizarse con materiales biocompatibles y estériles, que puede proceder de hueso del propio paciente (autólogo), de hueso biocompatible de células humanas donantes (aloinjertos) o células animales (xenoinjertos). Se pueden colocar en forma de partículas o bloques en función de la necesidad.
Es habitual, para garantizar el éxito de la regeneración ósea guiada, que este material óseo se utilice junto a plasma rico en factores de crecimiento, que obtenemos en una extracción de sangre del propio paciente, que tras procesarla en nuestra centrifugadora específica.
La intervención se puede realizar con anestesia local, y durante la misma no debe sentir ningún tipo de molestia. En muchos casos es posible realizar el procedimiento bajo sedación consciente, para aquellos pacientes que se sienten más intranquilos. La anestesista acompañará al doctor durante toda la intervención controlando las constantes vitales.
En los días siguientes es posible notar molestias y ligera inflamación. Como después de cualquier otra intervención común, es importante seguir las instrucciones postquirúrgicas de medicación y cuidado específico para evitar cualquier tipo de complicación.
Seguir la prescripción de medicación y enjuague pautada por el doctor/a especialista es vital para evitar complicaciones en el post operatorio. Además, es recomendable:
- Cepillar con suavidad la zona a partir del día siguiente a la intervención
- Utilizar el colutorio prescrito como antiséptico.
- Mantener reposo en los siguientes días, no hacer deporte ni grandes esfuerzos.
- No fumar en los 15 días previos y en los 15 días posteriores a la intervención. El tabaco reduce la vascularización del área intervenida y perjudica el resultado a corto y largo plazo
- Llevar una dieta blanda y fría los 2 días tras la intervención
Consulta con nuestro equipo de periodoncia e implantología todas las dudas que te surjan sobre este u otros tratamientos. Si crees que necesitas un tratamiento de implantes, es importante que recibas un diagnóstico y plan de tratamiento personalizado.